Por más que se intente no se puede ignorar a quién se quiere. Y es que cuando el corazón se rebela contra la razón, el amor se sobrepone. No importa que tengas una o mil razones para odiar.
A veces el corazón parece elegir el camino equivocado y de repente se aleja de todas las razones y de todos los motivos, y es justo en ese preciso momento, en el cuál aprecias todo lo que hay a tu alrededor.¿Por qué las pequeñas señales, los pequeños detalles, los pequeños e insignificantes momentos pueden llegar a confundir más de lo que pensamos?.Posiblemente sea porque en un gesto tan sencillo se encuentra todo el significado del universo.
Por mucho que lo intentemos, no seremos capaces de ignorar a esa persona, me gustó tu entrada y tu blog.
ResponderEliminarTe sigo, Saludos :)